Memorizar y saber memorizar es imprescindible a la hora de enfrentarse a un examen en el que te estás jugando mucho. Si incorporas en tus técnicas de estudio la autoevaluación, estarás repasando y memorizando sin que se haga aburrido.  

Cómo repasar para memorizar

Está claro que cuando más repasas más memorizas. Pero si te aburres leyendo lo mismo una y otra vez, se producirá el efecto contrario.

Por este motivo es importante que, primero, utilices varias técnicas que te van a servir para repasar y memorizar como resúmenes, esquemas, mapas mentales o tarjetas. Ya os hablamos de todas ellas en este post.

Tanto en su elaboración, como después en su repaso, vas a memorizar y, además, va a resultar entretenido hacerlos, ya que puedes incorporar colores, dibujos, etc.

autoevaluación repaso memorizarUna vez hecho el repaso de estos elementos, ya podrás hacer la autoevaluación.

Es importante que autoevalúes diariamente los conocimientos que has aprendido durante el día y repasar los que ya tienes consolidados.

Y para ello lo puedes realizar a través de los test u otras técnicas como esquemas y tarjetas. Puedes comprar libros de test sobre tu temario o confeccionarlos tú mismo.

Puedes utilizar la sencilla herramienta de Google Forms para confeccionar y corregir tus propios exámenes. Re dejamos este vídeo tutorial para que sepas cómo utilizarla. 

Pero es importante que no hagas siempre los mismos, porque no te aportará mucho.

También puedes hacer un grupo de estudio y así, os puede evaluar otro compañero y confeccionar más test entre todos.

La autoevaluación, una técnica eficaz de repaso para memorizar

 

Cómo realizar la autoevaluación

Repasa al comenzar y al terminar tu jornada de estudio

Comienza y acaba el día realizando, por un breve periodo de tiempo, un repaso a lo estudiado el día anterior (al empezar a estudiar) y lo estudiado durante el día (cuando termines tu jornada de estudio).

No repases siempre lo mismo

En este sentido entra en juego la llamada “curva del olvido”. Repasa el mismo tema al día siguiente y luego a lo largo de la semana ve espaciándolo a distintas horas.

Luego deja pasar unos días y vuelve a él. Lo que haces así es consolidarlo en tu memoria a largo plazo.

Recuerda que si siempre repites los mismos test, acabarás memorizando siempre lo mismo, y habrá partes del temario que no las repases y que pueden ser decisivas para aprobar el examen.

Lee con atención el examen

Al hacer la autoevaluación lee bien las preguntas que se te plantean y las diversas opciones de respuesta.

Es preferible que “pierdas” el tiempo leyendo con atención lo que te están preguntando que fallar respuestas, que incluso puede que supieras, por ir deprisa para que no te falte tiempo para acabar el examen.

Controla el tiempo

autoevaluación repaso memorizarIntenta hacer el los test de repaso en el tiempo que va a durar el examen.

Así vas practicando y controlando el tiempo que tardas en responder las preguntas que sabes y el que puedes dejar para pensar con más tranquilidad las preguntas en las que dudas o no sabes.

Cómo te ayuda la autoevaluación para memorizar

 

Controlarás mejor lo que has memorizado

Utilizando la autoevaluación vas a tener claro en todo momento lo que has memorizado o no de cada tema y lo que te cuesta más.

Aumentará tu concentración

Cuando haces la autoevaluación, sobre todo si es a través de tarjetas o tipo test, es decir, cuando es más rápido que no releer doscientas veces el tema, tu atención se focaliza, y tu concentración aumenta, por lo que memorizarás mejor.

Llegarás al examen con mucha tranquilidad

Y cuando lo realizas, además de controlar tus conocimientos sobre el tema (o los temas), vas a controlar el tiempo que tardas en hacer el examen, cómo te enfrentas a las preguntas difíciles.

De este modo, el día del examen no tendrás problemas para enfrentarte a él, lo que te proporcionará una gran tranquilidad.

Al estar tranquilo podrás tener la mente más despejada para contestar.

Además, como  ya has hecho muchos exámenes estarás acostumbrado al tipo de  preguntas y  a las diversas opciones de respuesta.

Aumentará tu memoria

Cuando compruebas  que has fallado una pregunta y la corriges de inmediato, buscando el error y anotando o ampliando la información de esa pregunta y de la respuesta verdadera, estarás haciendo un ejercicio de retroalimentación en ese mismo instante.

El motivo es que vas a empezar a repasar de otro modo, y poniendo en práctica otras técnicas de estudio.

Esto aumenta tu concentración y, a la vez, tu memoria.